El británico Tom Ingram, de 36 años, de Portsmouth, visitó recientemente el lago Ness, en Escocia, como turista y realizó un crucero en barco por el lago para contemplar sus pintorescos alrededores.
De repente, vio algo grande en la pantalla del sonar. Según los datos del sonar, ese algo estaba a una profundidad de unos 121 metros y era demasiado grande para el mayor pez o foca de la zona. La longitud del objeto era de más de 9 metros y se movía en el agua.
Lo más sorprendente es que hace dos años se registró en la pantalla del sonar un objeto similar de gran tamaño en la misma zona del lago. Entonces se instaló un sonar en el barco de Ronald Mackenzie. Mostró algo grande que colgaba a baja altura sobre el fondo del lago.
La forma de esta criatura era la misma «suavemente curvada» que en la foto fresca del sonar.
Según Tom Ingram, decidió tomar un crucero turístico regular por el lago desde Fort Augustus por las hermosas vistas de las orillas del lago.
«Estábamos más o menos a mitad de la ruta cuando nos dijeron que aparecía una forma extraña en la pantalla del sonar. Al principio pensamos que se trataba de un montaje -como parte de un crucero-, algo creado específicamente para los turistas, pero rápidamente se hizo evidente que ese algo se movía en tiempo real y era muy grande.
«Me clasificaría como alguien que no cree en la existencia de Nessie, es decir, por supuesto que todos sabemos que esos mitos existen, pero cuando lo ves con tus propios ojos en el sonar… nos tomó por sorpresa.
«Al principio estábamos preocupados, y luego muy desconcertados por lo que vimos».
Una imagen de sonar que muestra al supuesto monstruo Nessie, tomada en 2020, causó mucho ruido en la prensa y se habló mucho de que es una de las pruebas más convincentes de que algo enorme y extraño vive realmente en el Lago Ness.
La nueva foto demostró que si la primera foto todavía se podía llamar un «fallo técnico» con un tramo, entonces el segundo fenómeno similar en la misma zona difícilmente se puede llamar el mismo error.
El destacado experto en sonares Craig Wallace describió las imágenes como «muy curiosas», ya que ambas muestran «objetos grandes, claros y distintos que flotan extrañamente cerca del fondo del lago».
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