El neurocirujano Eben Alexander: «El más allá existe. He estado allí».
Típico científico que sólo cree en lo que es demostrable, este neurocirujano estadounidense, profesor de la Universidad de Harvard e hijo de neurocirujano, tuvo que retractarse claramente. Sus ojos han visto, y ya no podía negarlo.
Ocurrió en 2008, cuando el Dr. Eben Alexander se vio afectado por una forma grave de meningitis, entrando en coma profundo durante varios días. Durante ese tiempo, experimentó cosas increíbles, vio cosas igualmente increíbles, hasta tal punto que, una vez que salió del coma y se recuperó por completo, lo único que podía hacer era pensar en ello y volver a pensar en ello, pasando noches en vela sin poder parar.
Así que decidió escribir un libro (titulado «Millones de mariposas«), relatando textualmente lo que le había sucedido, incluso comentando científicamente sus experiencias. En este contexto, llegó incluso a la teoría de que las experiencias previas a la muerte pueden ser probadas por la cienciaa través del comportamiento de la actividad cerebral.
Ante esta afirmación, el mundo científico se ha rebelado, refutando por completo esta teoría. El Dr. Oliver Sacks, un reconocido neurocirujano británico ya fallecido, fue uno de los principales opositores a esta teoría, afirmando en un artículo de refutación que Alexander no había tenido una experiencia cercana a la muerte, sino que la suya había sido simplemente alucinaciones al despertar (sugestiones oníricas) y, por tanto, no durante el propio coma, es decir, sólo en el momento en que su corteza cerebral empezaba a funcionar de nuevo.
Su viaje, por tanto, no sería real, según la Ciencia (o los científicos…), aunque él está firmemente convencido de ello y también lo están quienes, como él, han tenido las mismas experiencias, que en la práctica, y sorprendentemente, han visto las mismas cosas. De hecho, afirma que ha visto el Paraísoencontrarse cara a cara con su Conciencia en el Más Allá, bajo la guía de una mujer maravillosa y casi perfecta, tal vez una Ángelun ángel guía.
En particular, dice que se encontró rodeado de millones de mariposas, en un hermoso mundo lleno de color y luz, otra dimensión poblada por seres etéreos y mágicosprobablemente el Plano Astral. Esto es lo que dijo en su libro, y si el mundo científico no lo apoyó, tantos otros lo hicieron, que el libro se convirtió en un best seller en pocos días.
No se puede imponer una creencia, y mucho menos hacer que la gente vea lo que otros, a pesar de todo, no quieren ver, pero siempre volvemos al punto básico, que es que si no pasas por ello no puedes entenderloasí que ser escéptico también tiene su razón de ser, y básicamente no es algo malo. De este modo, no se cae fácilmente en manos de los pregoneros, los ávidos productores de falsificaciones, que sueltan corbardías en aras del rating o simplemente por vanidad, y rebajan notablemente el nivel popular de la tendencia a creer en los hechos y en los testimonios, siempre en detrimento de la verdad.
0 comentarios